miércoles, 12 de mayo de 2010

All is violent, all is bright..

Recordar un beso puede atraer sonrisas o hacer que quiebres en llanto.
Hoy es un día en que estoy indecisa. No sé si sonreír, quebrar en llanto o dejar de recordar.

Muchos días ya en que estoy bloqueada y casi como zombie. Yendo al colegio, volviendo a casa, durmiendo mucho. Como si viviera cansada sin razón alguna. Pero "viviendo" al fin. Si es que se lo puede considerar así a lo que hacemos hoy en día.

Intentando evitar todo lo que me haga llorar, prefiero ya ni jugar ni cantar. Tele obviamente tampoco.

Ese primer beso hoy me parece tan lejano.. Y fue a penas hace casi 9 meses. ¿Quién diría que desencadenaría tantas peleas, angustias y broncas? Porque sí, lo lindo era con lo que contábamos. Como el momento mismo. ¿Pero y todo el desastre que siguió y sigue?
Desesperando por hacer lo imposible, lo más doloroso, lo imperdonable para mi alter ego, he de luchar conmigo misma, pelearme, gritarme, pegarme, moldearme de nuevo, como si tuviera 3 años y recién empezara a "entender" lo que pasa en el mundo. Re-viviendo y obviando cosas para no ser la que soy y dejarte disfrutar de la vida. Quizás, a la larga, haciéndote entender que no quiero destruirte, que no me interesa tu dolor sino tu felicidad. Algo tan simple de decir pero tan imposible de lograr..

El amor nos enloquece, nos ciega y nos pega una patada a las nubes. El problema es la caída..en picada.. Porque aún estando juntos nos venimos cayendo hace rato. Y por personalidad de los dos no paramos de caer. Nos tiramos los dos echándole la culpa al otro o masacrándonos nosotros mismos.. Sin darnos un respiro, de ninguna forma.

Sesiones y sesiones, mañanas, tardes y noches. Charlas habladas y escritas. Llenas de llanto y aún así sin lograr que me creas que no busco destruirte..
Al final prefiero ser un zombie, una esclava de tu felicidad para que paremos de pelearnos. No hablar, no opinar, no condicionar, no respirar. Solo regalar, entregar y hacer caso agachando la cabeza.